Habrá cambiado la vida en 10 años?. Quizá sea una respuesta demasiado obvia
para algunos, pero no creo que lo sea tanto para mí.
Esta bien, admito que después de 10 años, ahora tengo 20 años, y también
admito que he crecido, mi pelo ya no es el mismo, pues ahora me llegan hasta
el hombro. Pero, habrá algo más allá de eso?. (Obvio que si).
En este mismo instante no seré claro para escribir, y es probable que ni yo
mismo me entienda en verdad, pero puede ser que en cuando pase el tiempo y
relea esto, lo entienda de una manera muy distinta a la de éste preciso instante.
Crecí con algo que hace poco "murió", y eso, se echará de menos, pero creo
que cada vez que mis recuerdos quieran volver al bosque, al inmenso mármol,
a la vías del tren, bastará con con abrirlo, pero claro, no será lo mismo,
pues mis ojos serán otros.
El pobre chico de la ventana, murió, ahora se convirtió en algo más que algo.
Es un pobre tipo de sentimientos fríos. Es mejor que ser el chico de la ventana.
Al menos él lo cree.
No Surprises
No alarms and no surprises.
martes, 19 de julio de 2011
domingo, 1 de mayo de 2011
Lapsus de tiempo.
Acá sentado comienzo a desesperarme. No hay más formulas de saberlo, si tú, si yo, si nosotros estaremos allí. Tomo mi cabeza con las manos, para ver si ésta abandona sus deseos de explotar de tanto pensarte. Has pasado el limite de lo imaginable, sólo ahora te encuentro en canciones, películas y en sueño. Pero nada puede ser más fuerte que tu olor, aquel que me hace volar por el tejado de los vecinos, y entrar por la ventana como peter pan.
No suelo ser así, soy un insensible de mierda, que le da lo mismo exactamente todo, el que se ríe de los defectos de los demás, el que tira la talla como si fueran palomas de plazas. Pero por algo es... así que continuaré por este lapsus en el tiempo, no volveré a detenerme en el mismo puente y seguiré siendo el tipo de cabellera larga, rostros inexpresivo, mirando seriamente a las personas que cruzan la calle.
No suelo ser así, soy un insensible de mierda, que le da lo mismo exactamente todo, el que se ríe de los defectos de los demás, el que tira la talla como si fueran palomas de plazas. Pero por algo es... así que continuaré por este lapsus en el tiempo, no volveré a detenerme en el mismo puente y seguiré siendo el tipo de cabellera larga, rostros inexpresivo, mirando seriamente a las personas que cruzan la calle.
miércoles, 13 de abril de 2011
En carretera.
Entendí, como dicen por ahí, que la mejor forma de no hacerce cargo
de algo, es no tomarlo en mis brazos, no pensarlo en mi cabeza y no
quererlo.
No sé, pero sé que nada sé, sé que las ciscunstancias donde estoy
en este mismo momento sentado escribiendo esto, me han llebado a lugares
totalmente inexplorados, y creo creer que concuerdo con mi poeta favoríta,
Gabriella Mistral me decía que la experiencia es como un boleto de lotería
comprado después del sorteo... no creo en ella.
Estamos varados en medio de la caliente carretera, mi pies ya no sienten su
cancancio, mi espalda se tuerce cada vez más. Mi pelo, aquel largo pelo, ahora
me cubre el rostro, y la sangre con la tierra se fusionan para crear una atmosfera
perfecta de lo que soy.
Mis manos, mis humildes manos, y mis tiernos labios se condensan en mi cabeza,
creo que nada debió pasar, creo que la vida es un tonto juego que tarde o
temprano terminarás aburriéndote.
de algo, es no tomarlo en mis brazos, no pensarlo en mi cabeza y no
quererlo.
No sé, pero sé que nada sé, sé que las ciscunstancias donde estoy
en este mismo momento sentado escribiendo esto, me han llebado a lugares
totalmente inexplorados, y creo creer que concuerdo con mi poeta favoríta,
Gabriella Mistral me decía que la experiencia es como un boleto de lotería
comprado después del sorteo... no creo en ella.
Estamos varados en medio de la caliente carretera, mi pies ya no sienten su
cancancio, mi espalda se tuerce cada vez más. Mi pelo, aquel largo pelo, ahora
me cubre el rostro, y la sangre con la tierra se fusionan para crear una atmosfera
perfecta de lo que soy.
Mis manos, mis humildes manos, y mis tiernos labios se condensan en mi cabeza,
creo que nada debió pasar, creo que la vida es un tonto juego que tarde o
temprano terminarás aburriéndote.
martes, 5 de abril de 2011
Aquel viejo gigante.
Como dijo aquel viejo gigante, lo que tuviera que llegar, llegaría y ya habría tiempo de ponerle la cara.
sábado, 2 de abril de 2011
Volvamos a aquel farol.
La muerte, la indeseable muerte. Es aquella, que todo lo que vive teme, es el misterio más grande de la vida, pero no del ser. Espero poder verte para siempre, oírte para siempre, besarte para siempre, pero sé que un día se acabará y que de recuerdos permaneceremos. Mientras tú estés a mi lado, yo no podré dejarte ir, no podre dejar de verte, de sentir tu latido en mi corazón.
Perdóname si he llegado tarde a nuestra cita, si te he faltado el respeto, algún día piensa en perdonarme si no fui lo suficiente valiente para tomarte de la mano, abrazarte y decirte que te amo. Asumo mi error como el castigo que tendré que llevar sobre mí durante la eternidad.
Ven, bésame, quiero tocarte, quiero sentirte, quiero amarte como no lo hice nunca, que la muerte no sea una barrera. Que nosotros podamos vender todas todo impedimento, vivir de un sueño utópico.
Volvamos al año 1973, a aquella última tarde, donde fuiste vencida por tu mente y alma, nuestros nietos lloran ahora por no poder decirte abuela, tu hija aún sigue esperando en la puerta de la casa, verte llegar con el caramelo que solías traer a ella.
Volemos, vayamos a ese farol donde la vida parecía ser eterna, donde el universo se hacía pequeño comprado con nuestro amor, donde el bosque fue cómplice de lo que hicimos aquella noche y de haber visto a aquel ganso en la mañana, fue lo que nos trajo a la vida. Recorramos el mar con la mirada, rozando nuestras manos en el océano.
Perdóname por dejarte ir, por olvidarte. Te prometo que siempre te amaré, que siempre seremos uno. Vuelve…
Perdóname si he llegado tarde a nuestra cita, si te he faltado el respeto, algún día piensa en perdonarme si no fui lo suficiente valiente para tomarte de la mano, abrazarte y decirte que te amo. Asumo mi error como el castigo que tendré que llevar sobre mí durante la eternidad.
Ven, bésame, quiero tocarte, quiero sentirte, quiero amarte como no lo hice nunca, que la muerte no sea una barrera. Que nosotros podamos vender todas todo impedimento, vivir de un sueño utópico.
Volvamos al año 1973, a aquella última tarde, donde fuiste vencida por tu mente y alma, nuestros nietos lloran ahora por no poder decirte abuela, tu hija aún sigue esperando en la puerta de la casa, verte llegar con el caramelo que solías traer a ella.
Volemos, vayamos a ese farol donde la vida parecía ser eterna, donde el universo se hacía pequeño comprado con nuestro amor, donde el bosque fue cómplice de lo que hicimos aquella noche y de haber visto a aquel ganso en la mañana, fue lo que nos trajo a la vida. Recorramos el mar con la mirada, rozando nuestras manos en el océano.
Perdóname por dejarte ir, por olvidarte. Te prometo que siempre te amaré, que siempre seremos uno. Vuelve…
miércoles, 23 de marzo de 2011
Summer.
No han pasado ni tres semanas de que te conozco, pero puedo asegurarte que te quedarás dando vueltas en mi cabeza por un tiempo.
No quiero pareces un desequilibrado mental, he pensado mucho en eso, oh si. Quizá la historia se ha vuelto a repetir, y llegue tarde, tarde para decirte que te quiero.
No creo en las casualidades, y si me vieras como estoy, pensarías que estoy ahogándome en un vaso con agua. Tu pasado es mucho más grande que mis deseos de construir un futuro solido, por eso mismo pienso que no puedo estar aquí contigo. Lo políticamente correcto sería que tomara el próximo tren al olvido y de allí no salir nunca más.
Puede ser un tanto exagerado de mi parte, pero tu cabello, tu cuerpo, y tu manera tan sensual de vestirte es lo que me ha dejado completamente desnudo frente a esta situación. De algún modo sabía que pasaría algo así, y sabes por qué?. Porque sigo siendo el mismo tonto de siempre, el de siempre, el de siempre y lo seguiré siendo hasta que un puñado de tierra cubre mi rostro.
Escuchar nuestras canciones no valdrá de nada. Tener unos ojos muy similares, mucho menos, pero quizá en otro universo, paralelo puede ser, fuimos creados para conocernos a tiempo.
Maldito el destino, que juega conmigo como si fuera una ruleta, como si fuera aquel muñeco de porcelana que no siente nada, como aquel hombre bicentenario que cree sentir, pero en verdad no es más es un oxidado sistema de cables sin valor alguno.
Quizá, me fui en lo profundo de nuestras conversaciones. Espero estar equivocado, no puede ser tan cruel la vida. No?
No quiero pareces un desequilibrado mental, he pensado mucho en eso, oh si. Quizá la historia se ha vuelto a repetir, y llegue tarde, tarde para decirte que te quiero.
No creo en las casualidades, y si me vieras como estoy, pensarías que estoy ahogándome en un vaso con agua. Tu pasado es mucho más grande que mis deseos de construir un futuro solido, por eso mismo pienso que no puedo estar aquí contigo. Lo políticamente correcto sería que tomara el próximo tren al olvido y de allí no salir nunca más.
Puede ser un tanto exagerado de mi parte, pero tu cabello, tu cuerpo, y tu manera tan sensual de vestirte es lo que me ha dejado completamente desnudo frente a esta situación. De algún modo sabía que pasaría algo así, y sabes por qué?. Porque sigo siendo el mismo tonto de siempre, el de siempre, el de siempre y lo seguiré siendo hasta que un puñado de tierra cubre mi rostro.
Escuchar nuestras canciones no valdrá de nada. Tener unos ojos muy similares, mucho menos, pero quizá en otro universo, paralelo puede ser, fuimos creados para conocernos a tiempo.
Maldito el destino, que juega conmigo como si fuera una ruleta, como si fuera aquel muñeco de porcelana que no siente nada, como aquel hombre bicentenario que cree sentir, pero en verdad no es más es un oxidado sistema de cables sin valor alguno.
Quizá, me fui en lo profundo de nuestras conversaciones. Espero estar equivocado, no puede ser tan cruel la vida. No?
domingo, 27 de febrero de 2011
Mirar el cielo.
Cuando no hay nada que hacer, suelo acostarme en mi cama, al igual que un perro que se acuesta en el cesped de una plaza. Suelo mirar el cielo de mi habitación, pensando y soñando que no tengo responsabilidades en la esta vida y que mañana no me tendré que levantar temprano para iniciar un día cualquiera. Un día más de esta inexplorada vida. El crecer me entusiasma, pero a la vez me atemoriza por no saber lo que se avecina. Tengo ese sentimiento de extrañar, de no saber si estoy haciendo las cosas correcta o de que si simplemente podré seguir con esto.
Pensar que cada día gran parte del año, y cuando digo gran parte del año, son 40 semanas, donde me tendré que levantar temprano y hacer el mismo recorrido mañana, tras mañana. He estado años esperando este momento, el momento de ir hacia el cerro y alimentar la mente. Qué me deparará el futuro?. No sé si retroceder con un buen libro. (A mi parecer) o seguir hacia adelante e introducirme a la enviciante rueda de la vida y seguir con la sociedad, al igual que todos, sí.
Quién me podría dar alas para volar, para ver desde lo alto. Para verte, sin encontrarte ni conocerte.
Pensar que cada día gran parte del año, y cuando digo gran parte del año, son 40 semanas, donde me tendré que levantar temprano y hacer el mismo recorrido mañana, tras mañana. He estado años esperando este momento, el momento de ir hacia el cerro y alimentar la mente. Qué me deparará el futuro?. No sé si retroceder con un buen libro. (A mi parecer) o seguir hacia adelante e introducirme a la enviciante rueda de la vida y seguir con la sociedad, al igual que todos, sí.
Quién me podría dar alas para volar, para ver desde lo alto. Para verte, sin encontrarte ni conocerte.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)