domingo, 1 de mayo de 2011

Lapsus de tiempo.

Acá sentado comienzo a desesperarme. No hay más formulas de saberlo, si tú, si yo, si nosotros estaremos allí. Tomo mi cabeza con las manos, para ver si ésta abandona sus deseos de explotar de tanto pensarte. Has pasado el limite de lo imaginable, sólo ahora te encuentro en canciones, películas y en sueño. Pero nada puede ser más fuerte que tu olor, aquel que me hace volar por el tejado de los vecinos, y entrar por la ventana como peter pan.

No suelo ser así, soy un insensible de mierda, que le da lo mismo exactamente todo, el que se ríe de los defectos de los demás, el que tira la talla como si fueran palomas de plazas. Pero por algo es... así que continuaré por este lapsus en el tiempo, no volveré a detenerme en el mismo puente y seguiré siendo el tipo de cabellera larga, rostros inexpresivo, mirando seriamente a las personas que cruzan la calle.